Artículos para la familia

Los errores de refracción son trastornos oculares muy comunes, en los que el ojo no puede enfocar claramente las imágenes. El resultado es la visión borrosa, que puede causar discapacidad visual. Es a los 3 años de edad cuando debería realizarse una exploración ocular del niño por primera vez, un examen que se tiene que repetir anualmente o cada dos años aunque es importante visitar al oftalmólogo  ante la mínima sospecha. Los errores de refracción más comunes en la infancia son: La miopía: dificultad para ver claramente los objetos distantes.Te darás cuenta porque los miopes suelen apretar los ojos para enfocar mejor. Hipermetropía: dificultad para ver claramente los objetos cercanos; A causa de forzar la vista, se quejará de dolor de ojos y de cabeza, o sufrirá lagrimeo y pestañeo frecuente. Astigmatismo: visión distorsionada debido a la curvatura anormal de la córnea, que es la superficie transparente que cubre el globo ocular. Ambliopía (ojo vago): Se trata de la pérdida parcial de visión en uno de los dos ojos. Aunque esta patología no puede ser corregida con lentes, se puede tratar y corregir si se detecta antes de los 7 años. Un niño a termino debe rechazar la luz brillante  cuando esta se dirige en forma independiente a cada ojo ( cierra ambos ojos en forma inmediata). La evaluación se considera dentro de lo normal a la apertura de los ojos cuando la luz se apaga. Habitualmente los niños son capaces de fijar objetos con la mirada entre la cuarta y 6 semanas de vida. A las 8 semanas de edad empiezan a sonreír a un rostro humano. Entre los 2 y 3 meses de edad, el niño es capaz de seguir objetos con la mirada. Dentro del desarrollo visual fisiológico se pueden presentar los espasmos de convergencia o endotropia intermitente (estrabismo convergente o bizcos), estos son comunes en los lactantes, usualmente se resuelven completamente entre los 3 y 4 meses de edad, sin embargo ocasionalmente pueden estar presentes hasta los 6 meses. Consulta al oftalmólogo si tu hijo se sienta muy cerca del televisor, se queja de dolor de cabeza y de ojos cansados, escribe con la carita pegada al papel, presenta dificultades cuando lee a distancia, entrecierra los ojos para divisar algo que está lejos, pierde el interés por la lectura y los estudios o tiene dificultades para correr y sus movimientos son torpes. Muchos de los problemas oculares simples pueden corregirse con gafas. Para los niños, el uso de lentes no es algo agradable, es importante que animes a tu hijo a que las utilice debido a que es la única manera de corregir su defecto de visión. Elijan juntos la montura, y compre una que se ajuste a su gusto y a su criterio, pero que sea fuerte, estable y todoterreno por si se le caen las gafas jugando o saltando.

Debe evitarse el uso prolongado y continuado de la televisión y computadoras. No deben  leer con poca luz. La exposición a las pantallas produce fatiga visual y, por lo tanto, conviene corregir los malos hábitos de los más pequeños.

DRA. INÉS ORTIZ ALEMÁN SVPP TRUJILLO