Dra. Marianella Herrera.
El niño mocoso.
Es motivo de consulta frecuente en la consulta pediátrica que los padres consulten porque su niño presenta períodos de obstrucción nasal, aumento de mucosidad y tos. Generalmente, la causa es una infección respiratoria en sus vías respiratorias superiores (nariz, orofaringe, laringe y tráquea) la cual se conoce con el nombre de resfriado común. Además de los síntomas respiratorios pueden estar presente malestar general, dolores musculares y fiebre.
La mayoría de los niños desarrollarán al menos de 6 a 8 episodios de este cuadro al año. Estas condiciones pueden afectar la calidad de vida del niño ocasionando alteración de la alimentación, el sueño y el aprendizaje. Generalmente es un proceso autolimitado.
Las principales causas son principalmente infecciones virales en las cuales están incriminados más de 200 tipos de virus entre ellos el virus sincicial respiratorio, rinovirus, virus influenza A y B , Parainfluenza y Adenovirus, entre otros. También pueden estar presentes infecciones bacterianas como coinfección en casos complicados. Puede haber causas alérgicas y no alérgicas como en los casos de cuerpos extraños, pólipos ò tumores.
En el caso de las causas infecciosas, los mecanismos de transmisión serán por contacto directo, por manos contaminadas u objetos contaminados. El lavado o higiene de manos en combinación con el protocolo para la higiene respiratoria y la tos es el medio principal para evitar la transmisión.
Se han señalado factores que determinan la presencia y el riesgo de complicaciones tales como la edad menor de tres meses, ausencia de lactancia materna, presencia de reflujo gastroesofágico, asistencia a guardería, tabaquismo en el hogar, contaminación ambiental, malnutrición y hacinamiento.
La historia natural de las infecciones virales no complicadas consiste en un período de 3 a 4 dìas de fiebre acompañando los síntomas respiratorios. La rinorrea amarillenta o verdosa puede estar presente los primeros días sin signifique infección bacteriana. Estos síntomas se hacen más relevantes entre el 4 al 5to dìa para luego ir mejorando al final de la semana auto limitándose alrededor de los 10 dìas. La complicaciones como rinosimusitis, bronquitis ò neumonías aparecen cuando se intensifican los síntomas después de la primera semana.
Las recomendaciones generales son mantener el niño hidratado, tratar la fiebre e irrigaciones nasales con frecuencia con solución salina para aliviar la congestión nasal.Si los síntomas persisten, consultar al pediatra. Es muy importante evitar la automedicación.
Dra. Marianella Herrera
Puericultor y Pediatra
Vicepresidente de Junta Directiva de la SVPP Filial Carabobo
@mipediatrapages